viernes, 27 de julio de 2018

ESTADÍSTICA


         Cubierto por una sábana verde, Juan temblaba nervioso en la camilla. La luz blanca y limpia de la lámpara médica le deslumbraba y casi no le permitía ver la cabeza de la doctora que le atendía.
         - Lo tuyo Juan es un problema de estadística. - Laura hablaba a su amigo de pie, mientras le quitaba el apósito de su ojo izquierdo.
          - No sé qué quieres decirme. - Contestó Juan.
          - Soy médico forense y entiendo de esto - A la vez que hablaba, Laura hizo un gesto de disgusto al ver el globo ocular dañado- Es posible que pierdas este ojo. Ya te lo dije. - Y continuó - La sociedad se rige por la estadística y la optimización de recursos.
           - ¡Ay! me molesta la luz. Sigo sin entender - Juan hablaba entrecortado intentando comprender lo que su amiga quería decir.
            - Mira - Laura se sentó a su lado apoyando su mano sobre la rodilla  del paciente - El cáncer es una enfermedad complicada, con muchísimos enfermos que la padecen. Eso hace que sea un filón para las farmacéuticas y para la sociedad. Se invierten millones en su investigación y poco a poco se avanza en su tratamiento. Cada euro invertido favorece a miles de enfermos. Sin embargo la Fibrosis Pulmonar Idiopática la padece solo 15 personas por cada 100.000 habitantes. Es poco visible y no se le dedica prácticamente ninguna atención. Sencillamente no existe.
           Juan puso cara extraña y se asustó.
            - Pero ¿yo tengo eso además? - Casi gritó mientras las lágrimas salían tanto del ojo sano como del abrasado por la sosa.
            - No, no. Pero tu caso es igual ¿me entiendes? - aseveró Laura.
            - ¿Quieres decir que nadie va a hacer nada por mi? ¿Que tengo que aguantar lo que ella me haga hasta que un día me mate? ¿Que yo no existo?.